Su color es inconfundible, con una peculiar forma se distingue a metros de distancia, se trata de la flor de Jamaica, que se ha convertido en el nuevo inquilino de la zona rural de Guazapa.
Los cultivadores aseguran que su desarrollo es variable, en un proceso que dura aproximadamente seis meses, necesita espacio para expandir sus ramas y madurar al calor del sol.
Esta actividad se ha convertido en una actividad familiar, en la que luego de cosechar separan las semillas y clasifican según la calidad, y el tamaño de la flor.
Para ellos esta actividad ya es sagrada, porque marcó un antes y un después en la economía de los habitantes. Sin embargo, todavía hay algunas inquietudes acerca de cómo llegó a la región de Centroamérica.
Vídeo TCS.
Cultivo de la flor de Jamaica
La flor de Jamaica se cultiva principalmente en África Central, Tailandia, Sudán, China, Taiwán, México, Panamá, Estados Unidos, Jamaica, e India. De ellos los principales países productores son China e India, ambos tienen mercado de exportación.
En el mundo se producen más de 97,975 toneladas de flor de Jamaica. En América Latina, el mayor productor es México, aquí los productores cosechan aproximadamente 19,000 ha con rendimientos promedios de 289 kilos.
En un principio, la flor de Jamaica se cultivó para obtener la fibra de sus resistentes tallos, para que sustituyera al yute utilizado para hacer arpillera y consecuentemente fabricar sacos o cubrir bultos en almacenes o transportes.
Asimismo, en diversos lugares del mundo, comenzaron a diversificar las partes de esta versátil planta para su consumo fresco. Su consumo en bebidas puede ser tanto fría como caliente e ingerirse en el momento de su preparación o almacenarlo
La planta, sobre todo sus hojas y flores, se puede consumir en ensaladas y también en la elaboración de pasteles, salsas y conservas.
Te podría interesar: Árboles que están en peligro de extinción en El Salvador